• Parte de la base estadounidense de Al-Asad destruida por un ataque de misiles iraníes en la provincia de Al-Anbar, Irak, 13 de enero de 2020. (Foto: AFP)
Publicada: sábado, 1 de febrero de 2020 6:57

El ataque misilístico de Irán contra la base aérea Ain Al-Asad fue muy preciso y su infraestructura fue destruida, según un senador ruso.

“Creo que el ataque de Irán fue una medida de represalia, pero muy preciso. Creo que fue una acción apropiada (…) y destruyó su infraestructura”, indicó Igor Morozov en una entrevista concedida el viernes a la agencia iraní de noticias Tasnim.

Tras indicar que Irán ha demostrado que posee armas de alta precisión, el también miembro del Consejo de la Federación Rusa añadió que los iraníes pueden protegerse sin permitir que las fuerzas estadounidenses actúen a su antojo.

“En mi opinión, los estadounidenses quieren seguir los métodos del Mossad para asesinar a los líderes militantes”, recalcó, para luego aclarar que la lucha contra milicianos difiere del asesinato de quienes lideran formalmente las Fuerzas Armadas de un país que es miembro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es decir Irán.

Morozov advirtió a EE.UU. sobre las consecuencias de su política de “terrorismo de Estado”, precisando que los estadounidenses no son capaces de controlar las secuelas de tales medidas a largo plazo.

 

EE.UU. asesinó el 3 de enero al teniente general Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán junto con su compañero el subcomandante de las Unidades de Movilización Popular (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe), Abu Mahdi al-Muhandis, y algunos otros en una operación con aviones no tripulados (dron) en el aeropuerto internacional de Bagdad, capital iraquí.

Tras este crimen, Irán lanzó el 8 de enero los ataques de represalia del país persa a bases estadounidenses en Irak, localizadas en la provincia oriental de Al-Anbar y en la región del Kurdistán, como una bofetada y aseguró que decenas de soldados estadounidenses murieron en el ataque.

La gravedad de las lesiones que sufrieron los estadounidenses en el ataque contra Ain Al-Asad ha sido objeto de polémica, después de que el Pentágono, tras asegurar que no había ningún herido, informara que 11 soldados norteamericanos habían sido trasladados fuera del territorio iraquí para recibir tratamiento, como consecuencia del impacto de 13 misiles balísticos iraníes contra el mencionado recinto militar.

Poco después del ataque de Irán, el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció que “todo estaba bien”. El Pentágono, no obstante, anunció el 16 de enero, que 11 de sus soldados resultaron heridos. La cifra se elevó poco después, a “un mayor número de soldados heridos”, luego a 34, 50 y ahora a 64.

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