El sistema de entrenamiento, diseñado y fabricado por los expertos de la Fuerza Terrestre del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), simula todas las etapas, desde la carga y preparación hasta el lanzamiento del misil tierra-tierra Fath 360.
El sistema utiliza el fuselaje de un misil Fath 360 real, pero su motor y ojiva han sido reemplazados por un cohete ‘Arash’ de 122 mm.
El sistema de entrenamiento permite al oficial de misiles practicar, recargar y disparar proyectiles varias veces.
Con el uso de este sistema, además de aumentar los factores de seguridad, los costos de capacitación se reducen significativamente.

El misil balístico Fath 360 de combustible sólido ha sido desarrollado por el Ministerio de Defensa iraní. Tiene una longitud de más de 5 metros, pesa 787 kilogramos —incluyendo una ojiva de 150 kg— y alcanza una velocidad de mach 4.
Irán ha conseguido avances considerables en la industria defensiva pese a las sanciones impuestas por Estados Unidos contra el país y ha logrado la autosuficiencia en la producción de varios equipos y sistemas militares, entre ellos misiles, durante más de cuatro décadas tras la victoria de la Revolución Islámica.
Con todo, Irán ha asegurado en reiteradas ocasiones que su doctrina de defensa se basa completamente en la disuasión y su poderío militar no representa amenaza alguna para ningún país.
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