La Fiscalía General emitió un comunicado en el que afirma que acata la decisión de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia de trasladar el proceso que ese alto tribunal llevaba contra el expresidente y exsenador Álvaro Uribe Vélez por presunto soborno a testigos y fraude procesal.
Al respecto, el senador colombiano Iván Cepeda, en una entrevista concedida en exclusiva este miércoles a HispanTV, se ha pronunciado y afirmado que esa “no era la decisión que hubiéramos querido nosotros [en referencia a su persona y sus abogados], pero aceptamos y respetamos esa decisión del máximo tribunal de justicia penal en Colombia”.
Sin embargo, ha agregado, comenzarán a dar batalla jurídica en un nuevo escenario, que es más adverso, puesto que es una justicia ordinaria, donde los fiscales y los jueces tienen más posibilidades de ser “inmensamente presionados” por el poder que ejerce Uribe, así que “tendremos que comenzar a construir una nueva estrategia de defensa de nuestros derechos”, ha dicho.
En otro segmento de la entrevista, el senador colombiano ha denunciado la gran campaña de descrédito que ha desatado Uribe en su contra y en contra de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia de Colombia, que incluye toda clase de métodos; ha llegado incluso a contratar a una empresa de publicidad en EE.UU. a la que paga miles de dólares para ese propósito.
Al ser preguntado sobre si el exsenador, que tiene acusaciones pendientes por violación de derechos humanos, falsos positivos y asesinatos, entre otros, saldrá ileso de este primer juicio, Cepeda ha afirmado que definitivamente “hay una derrota política que es innegable”, para luego recordar que Uribe ha tenido que salir del Congreso y “no lo ha hecho por la puerta grande, sino por la puerta de atrás”.
“Uribe buscaba rehuir la competencia de la Corte Suprema. Dejó su investidura como senador de la República para que fuera otra instancia de la justicia la que lo investigara y eventualmente juzgara. Y ha conseguido ese propósito, pero a un costo político muy grande”, ha comentado el senador colombiano.
El 4 de agosto, la Corte Suprema de Justicia de Colombia determinó que existe el riesgo a que Uribe, que gobernó entre 2002 y 2010, obstruya la justicia en el caso que pesa en su contra desde 2018, razón por la cual, decretó que permaneciera bajo arresto domiciliario, convirtiéndose así en el primer exmandatario de Colombia en verse ante dichas circunstancias.
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