Pese a que ya tiene una gran variedad de usos, una empresa mexicana quiere aprovecharse al máximo. Los científicos mexicanos, están en busca de nuevas vías para dar uso a lo que es considerado como el tesoro verde de su país, el nopal.
De origen ancestral, la planta está tan presente en la cultura mexicana que ha sido plasmada incluso en su bandera. El nopal habría sido domesticado hace 9000 años y, junto con el maguey, el maíz y el frijol, fue el alimento principal de los grupos chichimecas.
Ahora, los investigadores quieren utilizarlo para producir energía renovable. Un proyecto que hace posible que este vegetal genere energía eléctrica, ser usado como fertilizante y ayudar a la regeneración del suelo árido.
El camino no fue fácil. Primero, unos 300 productores locales que trabajan en el Centro de Acopio y Comercialización de Nopal-Verdura comenzaron a separar más de 90 % de la basura diaria. El siguiente paso era transformar los desperdicios orgánicos limpios en biogás y biofertilizador.
Esta planta piloto se ubica en la Ciudad de México y es la única de su tipo en todo el país. Además es la más grande de América Latina y tiene la capacidad de generar 170 metros cúbicos de biogás. Esta cantidad puede ser transformada en 175 kilowatts hora por día. Con esta energía generada se da electricidad a 100 casas diariamente.
Este proyecto requirió una inversión de casi 800.000 dólares aportados por el Gobierno de la ciudad. Y puede ser ejemplo de lo que podría hacerse en los 300 mercados públicos de la toda la urbe.
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