El mandatario ruso llegó de sorpresa a la península de Crimea —que pasó de Ucrania a Rusia por un referendo en 2014—, un día después de que la Corte Penal Internacional (CPI) emitiera una orden de detención en su contra.
Durante su visita, Putin participó en la apertura de una escuela de arte y un centro infantil que son parte de un proyecto para desarrollar un parque histórico en el sitio de una antigua colonia griega, ha informado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
También, visitó la ciudad más importante de Crimea, Sebastopol, al volante de un coche, donde fue recibido por el gobernador regional Mijail Razvozhayev. “Nuestro presidente sabe cómo sorprender. En el buen sentido”, destacó Razvozhayev.
Crimea declaró su independencia de Ucrania en marzo de 2014, como resultado de un referéndum en el que más del 96 % de los participantes apoyó la incorporación de la entonces península ucraniana a la Federación Rusa.
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