Francia vive una jornada nacional de huelga en su universidad. Estudiantes, profesores y trabajadores de las universidades francesas han salido a la calle para manifestar su oposición a la política universitaria del Gobierno.
Manifestantes como estos en París, capital gala, que asisten al declive de la enseñanza superior, a la degradación de la universidad. La universidad francesa que cuenta con 2.500.000 de estudiantes y cerca de 500.000 trabajadores, está en crisis.
Desde el año 2000, los proyectos de reforma se siguen unos a otros y todos tienen dos cosas en común: la primera es que se han hecho de espaldas a estudiantes y trabajadores, y la segunda es que todos han fracasado.
La austeridad impuesta por el Gobierno ha llevado al cierre de laboratorios de investigación, y los que permanecen abiertos funcionan con un 30 al 60 por ciento de trabajadores con contratos precarios. Pero los estudiantes no se encuentran en mejores condiciones.
El acceder a la universidad se ha convertido en Francia en una carrera de obstáculos. La falta de medios presupuestarios y humanos lleva a una selección, creando una universidad a dos velocidades, una universidad desigualitaria. Hoy el 54 por ciento de los estudiantes de primer año de carrera, no logra aprobar.
Juan José Dorado, París.
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