Según el primer ministro canadiense, Stephen Harper, esta contribución militar ayudará a defender mejor la soberanía e integridad territorial de Ucrania.
Las fuerzas ucranianas recibirán formaciones sobre la neutralización de explosivos y municiones, seguridad de vuelo y modernización del sistema de logística, auxilio médico, entrenamiento de policías militares, y formación táctica de la Guardia Civil.
Los miembros de las fuerzas canadienses estarán en un centro de entrenamiento de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Yávoriv, a 1300 kilómetros de la zona de conflicto.
El líder de la oposición canadiense, Tom Mulcair, deplora que el Gobierno conservador haya tomado esta decisión sin consultar antes al Parlamento.
Los militares canadienses se unirán a una coalición internacional dirigida por la armada americana compuesta de 800 soldados estadounidenses y 75 británicos.
Jorge Zegarra, Montreal.
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