En estos días el tema de conversación en Panamá pasó de los escándalos de corrupción a la Cumbre de las Américas. Por ahora, está confirmada la participación de 31 mandatarios, entre ellos el presidente estadounidense, Barack Obama.
Entre las medidas de seguridad están la suspensión de dos días de clases, el cierre de oficinas públicas y privadas, así como de importantes avenidas y restricciones en el uso de los aeropuertos.
Toda esta logística de organización tuvo un costo inicial de 15 millones de dólares, pagados con fondos públicos. Por lo cual surgen los cuestionamientos sobre la efectividad de esta cumbre.
Sin embargo, los movimientos sociales aprovecharán la coyuntura para encontrarse en Panamá y realizar propuestas en las temáticas que ellos consideran realmente importantes. Asimismo, esperan que la participación de los presidentes suramericanos marque la diferencia con el discurso tradicional.
Paralelo a la cumbre de presidentes, se realizarán encuentros de los movimientos sociales, pueblos indígenas, y afrodescendientes. Y todos esperan reunirse con los presidentes progresistas Evo Morales, Cristina Fernández, y Nicolás Maduro, que estarán en Panamá.
Claudia Figueroa, Ciudad de Panamá.
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