A través de un comunicado emitido el martes, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán extendió sus felicitaciones al pueblo, al Gobierno, al Ejército y a la Resistencia libaneses particularmente a Sayed Hasan Nasralá, secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), el 18º aniversario de la “gloriosa victoria de los valientes hijos de la Resistencia Islámica del Líbano en la guerra de 33 días en 2006”.
“La guerra de 33 días se convirtió en un símbolo de la resistencia y la fuerza del pueblo libanés contra el régimen sionista, que siempre será recordada como una gran victoria en las mentes de la gente de la región”, destacó la nota.
Al hacer referencia a las palabras del Líder de la Revolución islámica de Irán, el ayatola Seyed Ali Jamenei, que describió el 23 de agosto como el Día de la Resistencia Islámica, destacó que, en este día, Hezbolá restauró la dignidad al mundo árabe e islámico.
El ministerio iraní afirmó que la “brillante victoria” de la Resistencia Islámica, lograda mediante la unidad y la solidaridad entre las distintas sectas y la determinación colectiva del valiente y resistente pueblo del Líbano, ha “asegurado la estabilidad y la seguridad, aportando orgullo y honor al pueblo libanés y a la región, en particular al frente de resistencia contra los ocupantes sionistas”.
Asimismo, la Cancillería resaltó que la postura de principios de Irán en apoyo a la Resistencia y contra el régimen de Israel se ha demostrado aún más durante los últimos 18 años.
“Esta postura pone de relieve la necesidad de un apoyo integral de los países y las naciones, en particular de los islámicos y los que buscan la justicia, a la firmeza del pueblo palestino y al frente de Resistencia contra el enemigo sionista como la única opción estratégica para recuperar los derechos perdidos de los palestinos, así como los de otras naciones de la región, y para la liberación de Palestina y la ciudad santa de Al-Quds (Jerusalén)”, enfatizó la nota,
El Líbano luchó en dos guerras israelíes, en 2000 y 2006, y en ambas ocasiones Hezbolá desempeñó un papel crucial, obligando al ejército israelí a retirarse. Al menos 162 israelíes, incluidos 119 soldados, murieron durante los combates.
Hezbolá se creó en respuesta a la invasión y ocupación del sur del Líbano por Israel en 1982, de la que finalmente expulsó a las fuerzas israelíes en mayo de 2000. Desde entonces, el movimiento se ha convertido en una formidable potencia militar, asestando reveses significativos al ejército israelí, en particular durante la guerra de 33 días en julio de 2006.
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