En una entrevista publicada el martes, el portavoz de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento iraní, Abolfazl Amui, afirmó que la decisión de la Unión Europa (UE) de imponer sanciones a algunas instituciones y funcionarios iraníes bajo el pretexto de los disturbios, no tiene otro resultado que la destrucción de la infraestructura de las relaciones bilaterales entre ambas partes.
“La reacción de la República Islámica ante las recientes sanciones será firme y eficaz”, aseveró el vocero para luego indicar que, si bien las medidas coercitivas definitivamente no son efectivas, dado que las autoridades iraníes no poseen bienes ni tienen planes en países europeos, generan una mentalidad negativa hacia la UE.
Amui cargó contra los firmantes europeos del acuerdo nuclear —Francia, el Reino Unido y Alemania— por su falta de compromiso con las obligaciones asumidas en virtud de dicho pacto, firmado en 2015, así como su papel no constructivo durante las negociaciones para reactivarlo.
“Si Europa cree que puede obtener concesiones de Irán a través de estas sanciones en las negociaciones futuras, esto demuestra que no tiene una comprensión precisa sobre Irán”, remarcó.
Las sanciones de la Unión Europea, aprobadas el 17 de octubre, se dirigen a 11 individuos y cuatro entidades iraníes, entre ellos la Policía, por supuesta represión de las protestas en el país por la muerte de Mahsa Amini, joven iraní de 22 años que falleció el 16 de septiembre en un hospital en Teherán días después de ser detenida en una comisaría.
Las autoridades iraníes denuncian, con pruebas, que los actos vandálicos y de caos ocurridos en las últimas semanas en el país bajo pretexto de la muerte de Amini, son parte de un plan diseñado y financiado desde Estados Unidos, Israel y varios países europeos para desestabilizar Irán y lograr un cambio del Sistema de República Islámica.
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