El grupo armado Talibán tomó el jueves el control del cruce fronterizo de Islam Qala con Irán en la provincia de Herat, en el oeste del territorio afgano. De hecho, hasta el momento, los talibanes controlan el 85 % del país.
Ante posibles preocupaciones por el avance de Talibán en fronteras con el país persa, el portavoz de la Cancillería iraní, Said Jatibzade, ha informado este viernes que “las fronteras de la República Islámica de Irán están en paz y seguridad gracias a los valientes guardias fronterizos de nuestro país, y no hay inseguridad en las fronteras de nuestro país con Afganistán”.
Ha detallado, además, que ante los conflictos en el cruce Sheij Abu Nasr Farahi, entre Afganistán e Irán, los funcionarios de seguridad y de aduana afganos se habían visto obligados a refugiarse en la parte iraní.
En otra parte de sus declaraciones, Jatibzade ha enfatizado que Teherán, en el marco de la buena vecindad, tomará las medidas necesarias de conformidad con las leyes y reglamentos con los acuerdos fronterizos con Afganistán.
Por su parte, el general de brigada Farhad Arianfar, subjefe de Operaciones de las Fuerzas Terrestres del Ejército iraní, durante una visita a las fronteras orientales de Irán, ha afirmado esta misma jornada que las fronteras del sureste y este del país están bajo vigilancia las 24 horas y son completamente seguras”.
Arianfar ha anunciado también que el Ejército y el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán vigilan de cerca los más mínimos movimientos cerca de las fronteras y no permitirán los movimientos ilegales en la zona.
Tras lo sucedido, Irán detuvo comercio a través de cruces fronterizos afganos en la zona, pero seguirá comerciando con Kabul a través de un tercer cruce fronterizo importante en Milak, en el sureste del país persa.
En varias ocasiones, Irán ha expresado su disposición para ofrecer todo tipo de apoyo al proceso de diálogo que encamine al fin del conflicto y la crisis en curso en Afganistán.
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