Durante una conferencia este domingo en Teherán, capital iraní, el ayatolá Sadeq Amoli Lariyani, ha denunciado “el doble rasero” del Occidente, encabezado por EE.UU., en los derechos humanos y ha agregado que los autoproclamados defensores de los derechos humanos son los mismos que crearon al EIIL.
“Daesh es uno de los ejemplos de las violaciones de los derechos humanos en el mundo contemporáneo”, ha precisado el ayatolá Lariyani, diciendo que EE.UU. creó esta banda ultraviolenta para “empañar la imagen del Islam”, socavar la estabilidad en el oeste de Asia y “asegurar allí su presencia militar prolongada”.
EE.UU. y algunos de sus aliados occidentales “han formado una llamada coalición para combatir el EIIL, pero en realidad están apoyándolo”, ha afirmado el responsable persa.
Daesh es uno de los ejemplos de las violaciones de los derechos humanos en el mundo contemporáneo”, ha dicho el jefe del Poder Judicial de Irán, el ayatolá Sadeq Amoli Lariyani.
Durante su discurso, Lariyani ha criticado al Occidente por guardar silencio en gran medida sobre los “crímenes de guerra” que ha estado cometiendo desde el año 2015 su aliado saudí en Yemen.
“Se están cometiendo crímenes de guerra en Yemen. Recientemente, un hospital fue atacado y (muchas) personas murieron”, ha dicho, refiriéndose a un ataque aéreo de la coalición liderada por Arabia Saudí que golpeó el jueves un centro sanitario en la ciudad portuaria de Al-Hudayda y mató a 60 personas e hirió a más de 100.
“Vemos que los autoproclamados defensores de los derechos humanos guardan mutismo (con respecto a estos países), pero cuando se trata de Irán, apoyan en nombre de la defensa a los derechos humanos a los alborotadores callejeros y los que queman las tiendas y dañan la propiedad pública”, ha denunciado.
Irán ha visto protestas esporádicas en Teherán y otras ciudades en los últimos meses por dificultades económicas. Las autoridades persas aseguran que las protestas se orquestaron desde el extranjero, y que los alborotadores fueron patrocinados por agitadores externos.
Estados Unidos ha ofrecido en múltiples ocasiones su apoyo a las protestas violentas en Irán, para impulsar un plan cuyo objetivo final es el “cambio de del sistema” en la República Islámica, según documentos secretos de la Casa Blanca.
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