El parlamento israelí ha avalado este miércoles en primera lectura el proyecto de ley para anexar Cisjordania, una votación que ha salido adelante por un estrecho margen y sin el apoyo del partido Likud, del primer ministro Benjamín Netanyahu.
El texto, que deberá pasar por otras tres lecturas, ahora queda en manos de las comisiones parlamentarias de Exteriores antes de regresar al pleno de la Cámara para su aprobación final, último paso antes de convertirse en ley.
Todos los diputados del Likud han votado en contra, a excepción de uno, Yuli Edelstein, quien rompió la disciplina de partido, decantando el resultado a favor de la medida, justo en un momento en que el vicepresidente estadounidense, JD Vance, se encuentra de visita en los territorios ocupados palestinos.
En reacción, el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) ha condenado, en un comunicado oficial, la iniciativa del parlamento israelí, asegurando que estas medidas son una señal de la naturaleza colonial y agresiva del régimen de Tel Aviv.
“La aprobación de este proyecto de ley revela el rostro colonial del régimen ocupante, que insiste en continuar sus esfuerzos por legalizar los asentamientos y consolidar la soberanía sionista sobre los territorios palestinos ocupados. Esto constituye una violación flagrante de todas las leyes y resoluciones internacionales pertinentes”, ha agregado.
HAMAS ha subrayado, además, que todos los intentos del régimen israelí de anexar tierras de Cisjordania son nulos e ilegales, y que jamás podrán alterar la realidad histórica y legal de estos territorios.
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