Comenzaron este martes las obras para retirar los escombros y abrir las calles de Gaza tras la destrucción total causada por los bombardeos y las operaciones militares de las fuerzas israelíes en los pasados dos años. Los palestinos en Gaza esperan encontrar a sus seres queridos, vivos o fallecidos. Hay muchos cuerpos y restos de los gazatíes asesinados por el régimen israelí bajo los escombros.
Las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja han pedido que se abran todos los pasos fronterizos de Gaza para permitir que la ayuda que se necesita desesperadamente llegue al territorio palestino.
Varios países ya han indicado que están dispuestos a complementar su financiación existente para los esfuerzos de reconstrucción en Gaza, pero también a abordar los desafíos más amplios en Cisjordania y Al-Quds Oriental. Algo que hasta este momento no se ha efectuado.
Según las estimaciones de la ONU, el 84 % de la infraestructura de Gaza está destruida y, en algunos barrios, el daño llega hasta el 92 %. La reconstrucción total de Gaza podría tardar “décadas” y dependerá en gran medida del flujo de dinero que se destine a ese fin.
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