Según el periódico en línea The Times of Israel, el diputado israelí Hanoch Milwidsky –que previamente defendió como legítimo violar a los presos palestinos– fue citado a interrogatorio el viernes por investigadores policiales, presuntamente bajo sospecha de haber cometido delitos sexuales.
Lahav 433, la unidad de delitos graves de la policía israelí, hizo pública la investigación contra varias personas involucradas en un caso de delito sexual, incluido Milwidsky, diputado del partido Likud, liderado por el primer ministro, Benjamín Netanyahu.
Aunque la policía se negó a revelar el nombre de Milwidsky o las acusaciones, informó que había citado a un legislador en ejercicio para interrogarlo debido a que estableció sospechas razonables sobre un caso abierto en 2022.
Además, los agentes policiales también detuvieron a otros dos implicados para interrogarlos, ambos bajo sospecha de obstrucción a la justicia que, según el Canal 12 israelí, se trata de un académico “de muy alto nivel” y un destacado abogado.
El medio señala que los dos sospechosos anónimos, junto con el diputado, están acusados de participar en esfuerzos para manipular el testimonio de una mujer que denunció por agresión sexual a Michael Leitman, líder de un grupo religioso donde Milwidsky se desempeñó como asesor legal antes de ser elegido en 2022 para el parlamento del régimen israelí.
Por su parte, Milwidsky calificó la investigación como una “persecución política”, que, según él, “ha traspasado todos los límites”.
“La fiscal general, Gali Baharav-Miara, y el sistema que ella encabeza siguen pisoteando la democracia y destruyendo la confianza del público”, declaró Milwidsky en una publicación en su cuenta de la red social X.
El político israelí ha enfrentado anteriormente acusaciones de agresión sexual, pero hasta la fecha no se ha presentado ningún cargo contra él. Antes de entrar en el parlamento israelí, una mujer denunció que la había agredido sexualmente en su casa en 2014, afirmando que Milwidsky –quien negó las acusaciones– la había manoseado al final de una reunión profesional.
A principios de año, una vez le preguntaron a Milwidsky sobre la legitimidad de violar a prisioneros palestinos y el funcionario israeli respondió con insistencia que “si es un Nukhba [combatiente del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS)], ¡todo es legítimo! ¡Todo!”.
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