Este martes, dos ataques armados al este de Tel Aviv, ubicada en los territorios ocupados palestinos, dejó al menos cinco colonos israelíes muertos.
Por su parte, el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) ha felicitado la operación, diciendo que “responder a los crímenes y el terrorismo del régimen ocupante es un derecho legítimo de todo nuestro pueblo hasta el final de la ocupación”.
De igual modo, el movimiento de Yihad Islámica Palestina ha afirmado que dicha operación de represalia subraya la insistencia de Palestina en que los ocupantes deben pagar el precio de la agresión y el terrorismo.
“Esta operación es una respuesta a los gritos de niños y madres y padres cuyos seres queridos fueron ejecutados por los ocupantes mientras la comunidad internacional mantenía silencio”, ha resaltado.
Mediante un comunicado, las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa, rama militar del Movimiento Palestino de Liberación Nacional (Al-Fatah), también han indicado que el ataque ha sido una respuesta natural a los crímenes del régimen de ocupación contra el pueblo palestino.
Además, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) ha manifestado que la heroica operación de Bnei Brak es un nuevo testimonio del compromiso del pueblo palestino con la Resistencia, así como un mensaje importante para el enemigo y los países que han normalizado sus relaciones con el régimen de Israel.
El Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP), a su vez, ha considerado que el régimen ocupante solo entiende el lenguaje de fuerza y que los palestinos tienen derecho a defender sus derechos.
Es más, la oficina de medios de los Comités de Resistencia Popular de Palestina ha alabado la operación de asesinato en Bnei Brak.
Las autoridades palestinas han pedido en reiteradas ocasiones a Israel que ponga fin a sus agresiones, empero este régimen no solo desoye las advertencias, sino intensifica las atrocidades contra el pueblo palestino.
Varios grupos palestinos consideran imprescindible que las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales cumplan con sus responsabilidades y actúen para acabar con la política de apartheid de Israel y obligarlo a pagar el precio de la sangre derramada en los territorios ocupados palestinos.
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