El Movimiento de la Resistencia Islámica de Irak (Hezbolá al-Noyaba) emitió el lunes un comunicado con una caricatura que muestra al líder de la región autónoma del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, con dos cuervos en la cabeza, en las que se puede leer el nombre en inglés de EE.UU. y ver el símbolo del régimen de Israel.
En la nota, Al-Noyaba advirtió del enfoque desestabilizador del líder del Kurdistán y sus simpatizantes por albergar centros estadounidenses e israelíes.
“Al albergar bases militares de EE.UU. y centros de espionaje del Mossad, los dirigentes de la región del Kurdistán de Irak, no solo quitaron la seguridad a los residentes del norte de Irak, sino que [...] han convertido esta zona en objetivo legítimo de los grupos de Resistencia islámica”, precisa la nota.
Los grupos iraquíes avisan que Kurdistán vende petróleo al régimen israelí y alertan de las actividades desestabilizadoras que el régimen de ocupación realiza desde esta región, las cuales han resultado en la formación de grupos terroristas y la expansión de inseguridad en la zona, advierten.
En este sentido, el líder del grupo iraquí Asaib Ahl al-Haq, Qais al-Jazali, consideró en marzo que atacar a las posiciones de Israel en cualquier punto del planeta es “una meta noble”.
En efecto, la Resistencia iraquí salió en defensa del ataque con misiles lanzado el 13 de marzo por el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán contra un centro estratégico del servicio de inteligencia de Israel (el Mossad) en Erbil, en Kurdistán iraquí, en reacción a los crímenes del régimen de Tel Aviv.
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