En declaraciones ofrecidas en un programa televisivo, el titular iraquí defendió el martes el ataque iraní con misiles realizado el 13 de marzo contra un edificio en Erbil, en la región del Kurdistán iraquí, y confirmó que el objetivo apuntado pertenecía al régimen de Israel.
Al-Jazali alzó la voz de protesta para señalar que es inaceptable que el territorio iraquí sea utilizado para amenazar la seguridad de los países vecinos.
“Atacar a las sedes israelíes en cualquier parte del mundo es legal y una meta noble, y lo apoyamos. Incluso si [el príncipe heredero saudí] Muhamad bin Salman ataca a una posición israelí en Irak, no nos opondremos”, remarcó.
¿Qué ocurrió en Erbil?
El Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán apuntó el 13 de marzo con 10 misiles balísticos de precisión, de clase Fateh, un centro estratégico perteneciente a la agencia de espionaje israelí (el Mossad) en respuesta a los crímenes del régimen de Tel Aviv cometidos contra Irán desde el suelo iraquí.
El jefe de la Unión Internacional de Eruditos Musulmanes (UIEM), Yabar al-Mamuri, reveló el 15 de marzo que hay bases del Mossad de Israel en Erbil y otras cinco provincias iraquíes.
Afirmó, además, que el lugar atacado se utilizaba para reclutar a elementos que realizarían “atentados contra los comandantes de las Unidades de Movilización Popular (Al-Hashad al-Shabi, en árabe) de Irak y los científicos nucleares de la República Islámica de Irán”.
Irán denuncia las actividades desestabilizadoras que Israel ha efectuado desde la región del Kurdistán, las cuales han resultado en la formación de grupos terroristas y la expansión de inseguridad en la zona.
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