Los albaneses son utilizados para obstaculizar [la aplicación del proyecto] Turkish Stream y el método estadounidense es presionar a Europa para fomentar un nuevo conflicto en los Balcanes
Los recientes choques en la ciudad de Kumanovo, a unos cuarenta kilómetros al norte de Skopje, la capital macedonia, han causado que Estados Unidos amenace los planes de construcción del gasoducto ruso-turco, construcción por la que rivalizan el Occidente y Rusia, ha declarado este martes el politólogo Dusan Prorokovic a la agencia rusa de noticias Sputnik.
“Los albaneses son utilizados para obstaculizar [la aplicación del proyecto] Turkish Stream y el método estadounidense es presionar a Europa para fomentar un nuevo conflicto en los Balcanes”, ha expresado Prorokovic.
Además ha aseverado que es probable que la renovada insurgencia albanesa en Kumanovo haya sido orquestada por Estados Unidos y sus aliados de la OTAN para descarrilar los planes de Rusia.
El Gobierno ha mostrado su apoyo a la construcción del gasoducto Turkish Stream y a su paso por territorio macedonio; ya se han llevado a cabo algunas reuniones sobre este tema en Budapest, capital de Hungría.
La OTAN y la Unión Europea (UE) pidieron el lunes “contención” debido a la muerte de 22 personas en los enfrentamientos desatados el sábado y el domingo entre la Policía y miembros de un grupo armado en Macedonia.
El sábado por la noche, hora local, ya llamó a la calma el comisario de la UE para Política de Vecindad y Negociaciones de Ampliación, el austriaco Johannes Hahn; de hecho, “insto a todos los actores a la máxima contención. Debe evitarse toda escalada, en el interés de la estabilidad general del país”.
Por su parte, las autoridades de Macedonia declararon terminada su operación en Kumanovo, la noche del domingo, hora local. “El grupo armado ha sido neutralizado. La zona está bajo el control de la Policía”, declaró a la agencia AFP Ivo Kotevski, portavoz de las fuerzas del orden.
Kotevski confirmó que cinco de los jefes de los rebeldes son albaneses de Kósovo, territorio al noroeste de Macedonia y próximo a la septentrional Kumanovo. En esta última, la población de etnia albanesa se cifra en el 25,8 % del total.
En los enfrentamientos, según el portavoz, murieron ocho agentes de policía y 14 miembros del grupo armado en cuestión. Kotevski no pudo confirmar la existencia de bajas civiles.
En 2001, también se produjeron luchas armadas en la zona —de seis meses de duración— entre las Fuerzas Armadas de Macedonia y fuerzas albanesas. Éstas últimas reclamaban mayor reconocimiento de sus derechos civiles y, de hecho, consiguieron cambios constitucionales en noviembre de ese año. El año pasado, en julio, volvieron a producirse nuevos enfrentamientos.
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