“Estoy mal y el equipo también. Es una evidencia que no estamos en nuestro mejor momento ni en el más efectivo si tenemos en cuenta el nivel que hemos llegado a tener esta temporada”, aseguró el entrenador del equipo Azulgrana.
El Barça, monarca defensor del torneo continental, era el gran favorito para quedarse con la corona y convertirse en el primer equipo en retener el título desde que el torneo se modificó y pasó a ser la Liga de Campeones.
En cuanto a actitud no puedo reprochar nada a mis jugadores. La derrota es culpa mía al 100 %, porque para eso soy el entrenador”, afirmó el entrenador del Barcelona, Luis Enrique.
Pero la derrota 2-0 ante el Atlético de Madrid el miércoles por la noche puso fin a las ilusiones del conjunto "culé".
El técnico asturiano se quejó del estado del cesped del Estadio del Vicente de Calderón, pero no quiso escudarse en excusas.
“Hoy era difícil tenerse en pie en el campo, no quiero que suene a excusa, pero es una realidad. En cuanto a actitud no puedo reprochar nada a mis jugadores. La derrota es culpa mía al 100 %, porque para eso soy el entrenador”, afirmó.
Barça marcó un récord al permanecer 39 partidos sin perder en todas las competiciones esta temporada, pero la racha terminó con la caída 2-1 ante Real Madrid en la Liga española. A partir de allí el equipo entró en una espiral y perdió cuatro de los últimos cinco partidos que jugó.
El Barcelona sigue ahora liderando la Liga española, con tres puntos de ventaja sobre Atlético de Madrid, y jugará la final de la Copa del Rey de España con Sevilla.
"Nuestros objetivos son los más altos y es un orgullo que el Barça sea el máximo favorito en todo, pero hay que entender la derrota como autocrítica y tenemos dos competiciones en el horizonte", explicó el técnico, al agregar que "debemos mejorar para conseguirlas. Si las ganamos en cualquier sitio del mundo sería una gran temporada".
myd/rha/mrk