De acuerdo con Oficina británica de Estadísticas, la tasa de inflación interanual del Reino Unido se ubicó al cierre de 2022 en 10,5 %, frente a 10,7 % registrado en noviembre. En concreto, la subida interanual del precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas se aceleró al 16,8 %.
Tras la publicación de las cifras, el ministro de Economía, Jeremy Hunt, confirmó que la elevada inflación corresponde a una “pesadilla la administración familiar”, perjudica la inversión empresarial y provoca huelgas.
Un escenario que deja latente preocupación. Los precios de los alimentos son los más altos en las últimas cuatro décadas.
Hablando con la cadena británica BBC, el director gerente de Creed Foodservice, Philip de Ternant, asegura que una variedad de problemas han estado afectando los precios, desde el conflicto en Ucrania hasta el cambio climático.
El creciente coste de vida en el Reino Unido va de la mano con el descontento de la población. El país ha vivido varios meses de huelgas de trabajadores de servicios públicos, con mayor incidencia en los ferrocarileros, educadores, trabajadores de ambulancias o bomberos. Ahora, empleados de distintos sectores se han declarado en huelga para exigir una mejora de sus salarios al Gobierno.
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