Según informó el miércoles el diario británico The Telegraph, altos cargos del MI6 del Reino Unido están tratando de evitar que el presidente de EE.UU., Donald Trump, revele los datos clasificados de una investigación sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016.
El diario precisa que los documentos en poder de Trump muestran que el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) había llamado a Carter Page, ex asesor de política exterior de la campaña del mandatario estadounidense en octubre de 2016, un mes antes de las elecciones, celebradas en noviembre de ese año.
La solicitud del FBI se basó, en parte, en las denuncias incluidas en un notorio expediente financiado por los demócratas y compilado por Christopher Steele, un ex agente de inteligencia británico.
Figuras familiarizadas de MI6 al respecto dijeron a The Telegraph que los jefes de inteligencia del MI6 mantienen una “preocupación genuina” de que la publicación de las partes clasificadas de las escuchas telefónicas del FBI revelaría sus “fuentes y métodos”.
Otra fuente afirmó que el Reino Unido está alarmado por un posible “precedente” peligroso que podría incitar a las personas a evitar el intercambio de información porque tendrían en cuenta que algún día se podría hacer pública.
La comunidad de inteligencia de EE.UU. ha acusado repetidamente a Rusia de haberse entrometido en las elecciones presidenciales de 2016 para influir en los resultados de la votación a favor del entonces candidato republicano Donald Trump.
A su vez, Rusia ha desmentido reiteradamente cualquier implicación por su parte en el sistema político estadounidense y asegura que se trata de una excusa para que la opinión pública no se centre en problemas internos más graves en EE.UU.
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