La instalación Snir está destinada a preparar a los soldados de Israel para la guerra urbana, incluyendo el combate subterráneo, informó el lunes el general de brigada Einav Shalev, comandante de la división de fuerzas terrestres del ejército del régimen de Tel Aviv.
El ejército israelí también planea tener el centro de entrenamiento para los soldados listo para finales del próximo año, mientras que la construcción de tres instalaciones similares se llevará a cabo en años posteriores, afirmó un funcionario de alto rango de las fuerzas de guerra del régimen israelí (IDF, por sus siglas en inglés), hablando bajo condición de anonimato.
“Entendemos que en un futuro conflicto, entrarán tanques en aldeas libanesas para tomar posiciones ‘terroristas’. Nuestro cuerpo acorazado tiene que estar preparado para operar en un entorno urbano lleno de escombros, por ejemplo”, añadió el funcionario.
La instalación Snir incluirá elementos subterráneos también porque se sabe que el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) tiene refugios subterráneos y túneles.
Entendemos que en un futuro conflicto, entrarán tanques en aldeas libanesas para tomar posiciones ‘terroristas’", dice un funcionario de alto rango de las IDF.
“Estamos estudiando estrechamente las tácticas de Hezbolá. Estamos preparando a las tropas para vestir como Hezbolá, actuar como Hezbolá, a pensar como Hezbolá”, ha añadido el funcionario militar.
El régimen de Tel Aviv había construido anteriormente una instalación similar, denominada “Malí”, en una base militar en Tze'elim, en el sur de los territorios ocupados, para simular un combate urbano contra el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS).
El presidente libanés, Michel Aoun, ha dicho recientemente que el régimen israelí se enfrentará a una “respuesta apropiada” si trata de violar la soberanía de El Líbano.
Israel ha violado en reiteradas ocasiones la soberanía de El Líbano provocando dos grandes guerras. La primera ofensiva, conocida como la Primera Guerra de El Líbano, fue un conflicto armado que comenzó el 6 de junio de 1982 cuando las fuerzas israelíes invadieron el sur del país árabe bajo el pretexto de expulsar a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) de dicho territorio. La guerra acabó con la victoria de Beirut, apoyado por Hezbolá, y la derrota estratégica de Israel.
En la segunda ofensiva, registrada el 12 de julio de 2006, el régimen de Tel Aviv, so pretexto de liberar a dos de sus soldados, lanzó amplios ataques desde tierra, aire y mar contra el territorio libanés (una ofensiva conocida como Guerra de los 33 Días). No obstante, gracias a la resistencia de Hezbolá, el régimen israelí se vio obligado a retirarse con las manos vacías.
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