Los estadounidenses rechazan las agresiones militares ilegales que el presidente Donald Trump emplea contra Irán e Irak. Así, en más de 80 ciudades, incluyendo Miami (Florida, sureste de EE.UU.), los ciudadanos salieron a las calles para decirle “no” a la guerra.
Recientemente la encuestadora Gallup reveló que casi el 80 % de los estadounidenses se opone a la guerra contra Irán, es más, la mayoría de los ciudadanos prefiere la vía diplomática para la solución de conflictos geopolíticos; pero el actual ocupante del Despacho Oval (oficina oficial del presidente de EE.UU.) piensa y actúa en favor de otros intereses, que no necesariamente son los del pueblo estadounidense.
En este sentido, casi inmediatamente al asesinato del general Qasem Soleimani, el índice Nasdaq de armamentistas corporativos como Lockheed Martin Corp, Northrop Grumman Corp y Raytheon Co. se disparó por los cielos generando jugosas ganancias para los mercaderes de la muerte. Estos ya se aprestan a la guerra contra Irán. Y a ello se les suman aliados interesados en promover el caos en la región.
No es necesario realizar complejas ecuaciones estadísticas para entender que la mayor parte de los estadounidenses no está de acuerdo con los aventurismos bélicos que Donald Trump intenta imponerle a EE.UU. y al resto del mundo. Y todo ello con tal de escapar del juicio político que se le viene encima o las elecciones y, también la incompetencia evidente de su Administración.
Marcelo Sánchez, Miami (EE.UU.).
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