“Las sanciones reimpuestas por EE.UU. contra Irán en Agosto y Noviembre de 2018 han tenido efecto limitado sobre la capacidad de ese país en llevar a cabo operaciones en Siria”, indicó la Oficina del Inspector General del Departamento de Defensa estadounidense (el Pentágono) en un informe publicado el lunes.
El Pentágono emitió este reportaje luego de que el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, reconociese que su iniciativa para mantener parte de unas 2000 tropas estadounidenses en suelo sirio con el fin de “expulsar toda bota iraní” del país árabe era una ambición ilusoria.
Mientras tanto, el ministro sirio de Exteriores, Walid al-Moalem, pidió el martes pasado a la República Islámica de Irán a mantener sus expertos militares en territorio sirio hasta la derrota total de los grupos terroristas, respaldados por algunos Estados extranjeros y destacó el papel de Teherán en la lucha contra el terrorismo.
Las sanciones reimpuestas por EE.UU. contra Irán en Agosto y Noviembre de 2018 han tenido efecto limitado sobre la capacidad de ese país en llevar a cabo operaciones en Siria”, indicó la Oficina del Inspector General del Departamento de Defensa estadounidense (el Pentágono) en un informe.
Las autoidades del país persa, por su parte, ha asegurado que Teherán seguirá prestando asesoría militar a Siria, siempre y cuando lo solicite el Gobierno del país árabe. “La presencia de asesores iraníes en Siria depende del Gobierno sirio. Irán mantendrá su presencia en Siria todo el tiempo mientras Damasco solicite la asesoría de la República Islámica”, subrayó el 31 de enero el portavoz de las Fuerzas Armadas de Irán, el general Abolfazl Shekarchi.
Desde el inicio de los conflictos en Siria (2011) e Irak (2014), el Gobierno de Teherán se convirtió en una fuente de apoyo a los ejércitos de estos países en sus campañas contra el terrorismo. Los esfuerzos antiterroristas de Irán no solo son saludados por Bagdad y Damasco, sino también por otros países, como Rusia.
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