En declaraciones realizadas hoy jueves en una reunión con los comandantes sobre las consecuencias y las razones de los últimos acontecimientos militares y de seguridad en Siria, el comandante en jefe del CGRI, el general de división Hosein Salami, ha señalado que el Cuerpo de Guardianes estaba al tanto de los movimientos de los grupos armados y takfiríes en Siria desde hace meses, e incluso sabía los ejes que habían determinados para realizar los ataque.
Ha subrayado que estos datos fueron trasladados a las autoridades políticas y militares de Siria, pero no existía la voluntad de cambio, la guerra y la perseverancia en su verdadero significado, por lo que lamentablemente sucedió lo que no debería ocurrir.
El general Salami ha rechazado esta idea que Irán debería participar en los enfrentamientos en lugar del Ejército sirio. “¿Es razonable que despleguemos a todas fuerzas del CGRI y Basich en el campo de batalla en otro país mientras el Ejército de ese país funcionaba como un espectador?”, ha cuestionado agregando que además de esto, todos los caminos hacia Siria estaban cerrados.
Tras remarcar que los últimos grupos que abandonaron Siria fueron las fuerzas del CGRI y que la última persona que salió de este campo fue un guardián, el militar de alto rango castrense iraní ha aclarado que observamos los hechos y actuamos en base a las realidades.
“Las estrategias deben cambiarse según la situación. No podemos resolver muchos problemas globales y regionales con las estrategias estancadas e inmutables”, ha precisado.
Tenemos una fuerte razón política para luchar
El número uno del CGRI ha hecho énfasis en que Irán decide y actúa de acuerdos con sus capacidades y talentos internos para luchar contra los enemigos. En este sentido, ha matizado que tenemos una fuerte razón política para luchar y una fuerte legitimidad para defenderse.
“Contamos con una gran nación para resistir, un gran Líder como una fuente de inspiración y orientación, y unas Fuerzas Armadas poderosas que permanecen intactas. Si nos hubiésemos debilitado, no llevaríamos a cabo [la operación de represalia] Verdadera Promesa”, ha resaltado.
La República Islámica no ha perdido sus brazos regionales
El alto mando castrense iraní ha desestimado ciertos rumores difundidos en los círculos políticos, intelectuales y entre la gente de que la República Islámica ha perdido sus brazos regionales tras los últimos acontecimientos en la zona. “No, el Sistema no ha perdido sus brazos”, ha remarcado.
Frente de la Resistencia no tiene dependencia geográfica a Irán
El general Salami ha asegurado que incluso en la situación actual de la región, los caminos están abiertos para apoyar el frente de la Resistencia, insistiendo en que todas las rutas no se limitan a Siria, aunque es posible que esto también experimente cambios poco a poco.
Ha indicado que durante los últimos 13 años, Irán se esforzó para que la Resistencia en el Líbano y Palestina no tengan dependencia en gran medida a la República Islámica desde el punto de vista de la conexión geográfica.
“El frente de la Resistencia ya no tiene dependencia geográfica. El Movimiento de Resistencia Islámica del Líbano (Hezbolá) sigue ahí, está vivo y se ve fresco”, ha apostillado.
Siria vive una crisis política, social y militar desde el domingo, cuando el grupo insurgente Hayat Tahrir Al-Sham (HTS), al frente de facciones afines, tomó Damasco y anunció que había tomado el poder, derrocando así al presidente Bashar al-Asad.
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