“El enemigo también teme el poder defensivo, el fin de la dependencia y el poder militar, especialmente, en el campo misilístico”, ha resaltado este sábado el general de brigada Amir Hatami.
Todo el mundo, incluso la hegemonía mundial, admite el inmenso progreso de Irán en el sector defensivo nacional, dice. Ante tal coyuntura, añade, EE.UU. busca destruir los logros de Irán mediante crueles sanciones.
Los enemigos, explica, libran una guerra económica contra el país con la intención de arrodillar a la nación iraní y vengarse de ella por haber elegido la Revolución Islámica e impulsarla.
Hatami también ha recalcado que hoy en día la industria defensiva de Irán, bajo el liderazgo del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha logrado la autosuficiencia en diferentes campos: el combate terrestre, naval, aéreo, misilístico, electrónico y un largo etcétera.
El titular de Defensa de Irán aseguró en mayo que la República Islámica seguirá produciendo equipos militares pese a las presiones y sanciones en su contra.
A su vez, el coordinador adjunto del Ejército de Irán, el contralmirante Habibolá Sayari, enfatizó en el mismo mes que las Fuerzas Armadas de Irán son de las más exitosas del mundo a la hora de proporcionar y abastecerse de equipos militares.
En las cuatro décadas transcurridas desde la victoria de la Revolución Islámica (1979), Irán se ha hecho autosuficiente en la producción de numerosos equipos y sistemas militares, y se encuentra entre los cinco principales productores mundiales de misiles antiarmadura.
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