Según han declarado testigos este martes, un grupo de colonos ilegales, liderados por el rabino extremista Shimshon Alboim, partidario de la “demolición” de la Mezquita de Al-Aqsa, ha irrumpido en los patios de este lugar de una manera, descrita por los lugareños, como altamente provocativa.
La Mezquita de Al-Aqsa, el tercer lugar más sagrado para los musulmanes, tras La Meca y Medina, es objeto cotidiano de incursiones y violaciones por parte de colonos israelíes. Estos últimos realizan recorridos provocativos por sus patios y realizan rituales bajo la protección de las fuerzas sionistas.
En la más reciente agresión al recinto religioso, las fuerzas israelíes han impuesto severas restricciones a los fieles palestinos, quienes han denunciado la confiscación de sus documentos de identidad en las puertas de la mezquita, así como el acceso limitado al lugar sagrado.
La organización Al-Quds Islamic Waqf (Waqf islámico de Al-Quds), responsable de controlar y gestionar la Mezquita de Al-Aqsa, ha confirmado que agrupaciones extremistas de colonos sionistas conocidas como los llamados “Grupos del Templo”, estaban intensificando esfuerzos para obtener acceso sin restricciones al sitio.
Escalada agresiva no cesa en Cisjordania
Estos hechos se enmarcan en medio de la escalada agresiva de la ocupación en Cisjordania, donde han comenzado este martes operaciones de demolición a gran escala en los campos de refugiados de Tulkarem y Nur Shams, bajo asedio durante más de 100 días.
La actual campaña de agresión militar ha causado estragos en las infraestructuras civiles, y numerosos informes han destacado la destrucción de viviendas, evacuaciones forzadas y una creciente crisis humanitaria agravada desde principios de 2025, tras el anuncio de la operación Muro de Hierro por parte de Israel contra territorio cisjordano.
Como resultado, en Tulkarem más de 4200 familias y unas 25 000 personas han quedado desplazadas, mientras la más reciente ola de violencia ha causado la muerte a 13 palestinos, entre ellos un niño y dos mujeres, una de ellas embarazada de ocho meses, según reportes de la agencia de noticias Wafa.
Wafa indicó que el gobernador de Tulkarem, Abdulá Kamil, calificó de “verdaderamente sádica” la demolición de 15 viviendas en el campamento de Nur Shams por las fuerzas de ocupación, un hecho que agrava el sufrimiento de los residentes y la crisis de desplazamiento forzado en Cisjordania.
Las agresiones militares de Israel en este territorio palestino se intensificaron exponencialmente desde octubre de 2023, tras el comienzo del genocidio en la Franja de Gaza.
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