En Francia, los dos candidatos que llegaron a la segunda vuelta de las presidenciales han hecho sus últimos esfuerzos para convencer a los ciudadanos.
La candidata ultranacionalista Marine Le Pen volvió a arremeter contra su rival centrista, Emmanuel Macron. Lo responsabilizó de la mala situación económica de Francia, ya que según ella Macron ha sido parte del Gobierno durante los últimos 5 años.
Los detractores de Le Pen aprovecharon su vista a la catedral de Reims para manifestarse en su contra. La concentración obligó a la candidata a salir por la puerta trasera.
Emmanuel Macron, por su parte, repitió sus críticas contra su rival, a la que acusó de demagoga y de aprovecharse de la indignación del pueblo para llegar al poder.
La posible llegada al poder de Marine Le Pen obligó al actual presidente de Francia, François Hollande, a sonar las alarmas contra la retórica de la candidata nacionalista durante las presidenciales.
Los últimos sondeos dan un amplio margen a Macron sobre su rival. Si son ciertas y precisas estas encuestas, el centrista ganaría la segunda ronda de elecciones con más del 60 % de los votos.
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