El Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), en sesión el jueves en Nueva York, en el marco del 80º período de sesiones de la Asamblea General de la ONU, reafirmó su compromiso con la soberanía, independencia y paz de América Latina y el Caribe, frente a lo que calificó como “nuevas amenazas de injerencia y militarización” por parte de Estados Unidos.
La plataforma regional determinó la conformación de una “misión especial” que visitará los países de Latinoamérica y el Caribe “para defender la proclama de la Zona de Paz” en la región y promover el diálogo con “gobiernos, parlamentos, academias y pueblos, y movilizar apoyos regionales e internacionales” en favor de la soberanía y estabilidad regional.
“Nos sumamos al llamado de convocar a una Gran Conferencia por la paz en América Latina y el Caribe, como espacio indispensable para responder colectivamente a las amenazas que enfrentamos”, destacó ALBA-TCP como lo refleja en su declaración.
El documento reafirmó la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz y rechazó el “despliegue militar injustificado y extraordinario de Estados Unidos en el Caribe, al introducir destructores, cruceros lanzamisiles y submarinos nucleares”.
Condenó además las ejecuciones extrajudiciales “confesadas por el propio gobierno de Estados Unidos”, perpetradas en el mar Caribe, advirtiendo que estas acciones violan flagrantemente los derechos humanos fundamentales y buscan “transformar una región de paz en un espacio de confrontación y militarización”.
Final Declaration of the 26th Political Council of the countries of the Bolivarian Alliance for the Peoples of Our America-Treaty of Peoples' Trade (ALBA-TCP). pic.twitter.com/IRoAEoYbPa
— ALBA (@ALBATCP) September 25, 2025
Finalmente, los países del ALBA-TCP subrayaron la urgencia de una posición conjunta de la Celac frente a las injerencias externas y anunciaron la creación de una Misión Especial, que recorrerá América Latina y el Caribe para defender la Proclama de Zona de Paz y sumar apoyos internacionales.
De igual manera, repudiaron el informe emitido por el Departamento de Estado de Estados Unidos que califica a Venezuela como un país productor y de tránsito de droga.
Al respecto, reafirmaron que ese documento difiere de la posición fijada en informes de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (1999-2025) y de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (2024-2025), donde se califica a Venezuela como un país no relevante en este aspecto.
Afirmaron que este hecho “evidencia la construcción de una narrativa falsa y cínica” que busca un cambio de régimen del gobierno democráticamente electo por el pueblo venezolano.
El Consejo Político de la Alianza Bolivariana expresó también su “absoluto respaldo” al presidente Nicolás Maduro, ante las acusaciones infundadas desatadas en su contra, las cuales consideró carentes de sustento legal al generar un hostigamiento mediático y amenazar con deslegitimar su gobierno electo democráticamente.
Desde agosto, la tensión entre Estados Unidos y Venezuela ha llegado a su punto más crítico tras el despliegue de más de 4000 efectivos cerca de las costas venezolanas en el Caribe, junto a ocho barcos militares con misiles y un submarino de propulsión nuclear; además del envío de diez aviones de combate F-35 a una base aérea en Puerto Rico, bajo el pretexto de enfrentar a los cárteles de droga.
Ante ello, Venezuela ha movilizado al pueblo para recibir entrenamiento en el uso de armas y estar listos en caso de que tengan que defenderse ante una eventual intervención militar.
ncl