“Hoy el Gobierno de Estados Unidos, violando la Convención de Viena, el derecho internacional, el carácter sagrado e inviolable de las embajadas, ha allanado, asaltado con grupos de comando el recinto de la embajada de Venezuela de manera brutal”, aseveró el mandatario venezolano en un acto celebrado este jueves en Caracás (capital).
El jefe de Estado sudamericano, del mismo modo, condenó la ilegal toma del local diplomático y el arresto de los activistas norteamericanos que permanecen desde hace semanas, con autorización del Ejecutivo bolivariano, para evitar su ocupación ilegítima.
Asimismo, Maduro ordenó al canciller Jorge Arreaza y al embajador de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Samuel Moncada, a llevar “la denuncia hasta las últimas consecuencias y que el sistema de Naciones Unidas se pronuncie, más temprano que tarde”.
Las declaraciones del presidente venezolano se produjeron después de que el mismo jueves la Policía de EE.UU. irrumpió en la sede diplomática de Venezuela en Washington, capital estadounidense, y detuvo a al menos cuatro activistas que salvaguardaban la legación.
Hoy el Gobierno de Estados Unidos, violando la Convención de Viena, el derecho internacional, el carácter sagrado e inviolable de las embajadas, ha allanado, asaltado con grupos de comando el recinto de la embajada de Venezuela de manera brutal”, dijo el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
En respuesta a tal medida de Washington, Arreaza, en un mensaje en su cuenta de Twitter, condenó el desalojo de la embajada venezolana en Washington.
El ministro de Exteriores venezolano aseguró también que la decisión de EE.UU. de “tomar” e “invadir” a la sede venezolana, “incumple sus obligaciones de la Convención de Viena y viola los derechos humanos de los activistas” que se encontraban en la sede diplomática desde mediados de abril con la autorización del Gobierno de Caracas para protegerla de la toma de control por parte de personal nombrado ilegalmente por el autoproclamado “presidente interino” Juan Guaidó, como parte del golpe de Estado orquestado por EE.UU.
Ante la tensión que se atraviesa en la legación venezolana en EE.UU., la República Bolivariana ha instado a la Administración de Washington de proteger el recinto y cumplir su obligación como signatario de la Convención de Viena, que lo obliga a proteger el edificio de la embajada de Venezuela en Washington, tal como el Ejecutivo venezolano protege sus instalaciones en Caracas.
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