• El viceministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, durante una entrevista con los medios.
Publicada: miércoles, 29 de agosto de 2018 7:35
Actualizada: jueves, 30 de agosto de 2018 2:29

Rusia insta a EE.UU. y Alemania a usar su influencia en los grupos armados presentes en el norte de Siria para evitar otra provocación con armas químicas.

“Desearíamos llamar a Washington y Berlín a utilizar los medios disponibles para influir en los miembros de la oposición armada y las células terroristas; en este último caso, no me estoy refiriendo a Alemania sino a EE.UU., con las que mantienen contactos”, indicó el martes el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov.

Las autoridades de Rusia y Siria han informado recientemente sobre un plan de los grupos armados para realizar un falso ataque químico en la provincia de Idlib, en el norte de Siria, lo cual servirá de pretexto para que varios países occidentales ataquen esta nación.

Riabkov, sin embargo, advirtió que los miembros del grupo Frente Al-Nusra (Frente Fath Al-Sham) está ultimando los preparativos para una provocación muy grave en Idlib con el uso de sustancias de cloro.  

De acuerdo con el diplomático, los llamados Cascos Blancos también han planeado subir en las redes sociales una grabación de un ataque químico, con el subsiguiente griterío de que el Gobierno de Damasco ha vuelto a usar armas químicas contra su pueblo.

Desearíamos llamar a Washington y Berlín a utilizar los medios disponibles para influir en los miembros de la oposición armada y las células terroristas; en este último caso, no me estoy refiriendo a Alemania sino a EE.UU., con las que mantienen contactos”, indicó el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, para después alertar sobre una provocación química en el norte de Siria.  

 

“Un guión absolutamente trivial. Estamos haciendo todo lo posible para evitar su implementación. Estados Unidos como Alemania están en condiciones de prevenirlo conjuntamente”, agregó Riablov.

El pasado mes de abril, EE.UU., el Reino Unido y Francia lanzaron un masivo ataque aéreo contra Siria, en respuesta a un presunto ataque químico en la ciudad siria de Duma, situada en la región de Guta Oriental, sin dar tiempo a que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) iniciara sus investigaciones sobre el incidente.

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