• El embajador ruso en Washington D.C., Estados Unidos, Anatoli Antonov.
Publicada: miércoles, 9 de noviembre de 2022 22:17

Un diplomático ruso advierte de que Ucrania provocaría una catástrofe radiológica, al usar la bomba sucia, para crear enfrentamientos entre potencias nucleares.

El Gobierno de Kiev se ha convertido en el “principal punto de apoyo antirruso” para los países occidentales, que “no oculta” su disposición de luchar contra Moscú “hasta el último ucraniano”, expresó el miércoles el embajador ruso en Washington, Anatoli Antónov, en un artículo publicado en su canal de Telegram.

Puso de relieve que, en este momento, Rusia se enfrenta a “la amenaza de una catástrofe radiológica”. El mes pasado, autoridades rusas denunciaron que su servicio de Inteligencia había detectado que Kiev está tramando un sabotaje con la llamada bomba sucia para luego acusar a Moscú de terrorismo nuclear.

Antónov recordó que la detonación de tal dispositivo dispersaría materiales radiactivos en un perímetro de hasta varios miles de metros cuadrados y crearía una zona de exclusión por entre 30 y 50 años.

Enfatizó que las alertas de Rusia sobre bombas sucias son desestimadas en EE.UU. como “falsas” e “infundadas”, mientras que la finalidad de Kiev es “hacerse pasar por una víctima e involucrar directamente a EE.UU. y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el conflicto”, es decir, enfrentar a potencias nucleares.

 

Asimismo, declaró que, al consentir las acciones del Gobierno de Ucrania, EE.UU. y sus aliados de Europa se convierten en “patrocinadores y cómplices de terrorismo nuclear”

“La culminación de la hipocresía occidental fue ignorar las palabras de [el presidente ucraniano Vladímir] Zelenski sobre su intención de devolver al país a su estatus nuclear. El mundo se estremeció, pero Occidente hizo todo lo posible para que estas declaraciones se ahogaran en una avalancha de propaganda antirrusa”, sostuvo el diplomático ruso.

Al final, Antónov afirmó que Rusia no empezará guerras, sino que las finalizará. “La única pregunta es hasta dónde está dispuesto a llegar Estados Unidos. ¿Serán capaces de parar en la línea peligrosa?”, se preguntó.

Las bombas sucias, también conocidas como arma radiológica, son un tipo de armas que no son lo mismo que armas nucleares, ya que no tienen la gigantesca fuerza y destrucción que una explosión atómica, pero son capaz de dispersar sustancias radioactivas en la zona afectada.

nrl/ncl/mkh