“No hay duda de que se está preparando tal provocación. Hemos presentado ante la ONU (Organización de las Naciones Unidas) y la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas), con sede en La Haya, pruebas recibidas de diversas fuentes y todas coinciden”, ha declarado hoy viernes el ministro ruso de Exteriores.
En una rueda de prensa celebrada en la ciudad rusa de Sochi, Lavrov ha denunciado además intentos de grupos terroristas por utilizar sustancias químicas con gas cloro en el país árabe para luego acusar al Gobierno sirio de ser responsable de lo ocurrido.
Por otro lado, el jefe de la Diplomacia rusa ha defendido el derecho del Gobierno de Damasco de lanzar una ofensiva antiterrorista en la provincia noroccidental de Idlib, considerada el último bastión rebelde en el país.
“Las autoridades sirias tienen todo el derecho a garantizar su soberanía y liquidar la amenaza terrorista en su territorio”, ha agregado el alto funcionario, según recoge la agencia rusa de noticias Sputnik.
No hay duda de que se está preparando tal provocación. Hemos presentado ante la ONU (Organización de las Naciones Unidas) y la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas), con sede en La Haya, pruebas recibidas de diversas fuentes y todas coinciden”, declara el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov.
En otra parte de su discurso, Lavrov ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que se dé cuenta de su responsabilidad de prevenir provocaciones con armas químicas en Siria.
“Es necesario hacer esfuerzos para que las organizaciones internacionales sientan su responsabilidad por las provocaciones que se planean (en Siria) y denunciar estos intentos”, ha apostillado.
Rusia ha advertido recientemente de que EE.UU. está preparando junto al Reino Unido y Francia una agresión a Siria, en respuesta a un falso ataque químico que tratan de montar con los terroristas en Idlib. El Occidente, a juicio del Kremlin, amenaza al Gobierno de Damasco para evitar la expulsión de los extremistas.
Por su parte, el Gobierno de Damasco ha negado en reiteradas ocasiones haber usado armas químicas contra su pueblo y ha tachado esas acusaciones de “intento descarado de obstaculizar el avance del Ejército” frente a los grupos terroristas.
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