En sus visitas a la capital austríaca, los cancilleres del Sexteto han mencionado el progreso e incluso la esperanza de que los próximos días alumbren ese acuerdo nuclear final.
Las idas y venidas de los ministros de Exteriores del Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) han dibujado una jornada ajetreada en la que los mensajes de progreso han arrojado esperanza de consecución de un acuerdo.
Los ministros del G5+1 han estado acompañados por el ministro de Asuntos Exteriores de Austria, Sebastian Kurz, que secunda los deseos de éxito para un proceso que su país ha acogido intermitentemente durante más de año y medio.
Hay pocas sombras de duda y pocos mensajes negativos. Incluso la presencia del canciller chino se ha sumado a los buenos augurios, pues se consideraba que Wang Yi solo participaría cuando el acuerdo estuviera muy avanzado, y en sus propias palabras hay altas posibilidades de que se cristalice antes del 7 de julio.
Pese al mensaje optimista que todos los cancilleres han dibujado, la conclusión del acuerdo no parece ni mucho menos inminente. Según los expertos, las próximas horas serán decisivas para que EE.UU. consolide su decisión de levantar las sanciones y determine con ello el destino del acuerdo nuclear.
Raquel González, Viena.
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