El enojo de Venezuela llegó luego que el oficialismo y parte de la oposición en España votaran una ley pidiendo la libertad de algunos dirigentes opositores presos, acusados de promover los graves disturbios que en 2014 dejaron 43 muertos y decenas de heridos graves.
Mientras el Gobierno venezolano formula estas advertencias, expertos opinan que España contraataca tras el respaldo masivo a Venezuela luego del decreto del presidente de EE.UU., Barack Obama, que declara al país caribeño como amenaza a su seguridad nacional.
Se esperan ahora nuevas decisiones de Caracas, tras la orden del presidente de Maduro de revisar todas las relaciones diplomáticas con España.
Marcos Salgado, Caracas.
smd/nal