El vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán ha enfatizado este domingo que esta profanación representa una clara violación de la santidad y el estatus religioso de este lugar sagrado, así como una flagrante infracción de las resoluciones de las Naciones Unidas.
Asimismo, el diplomático iraní ha puesto de manifiesto que es otro indicio de la intención maliciosa del régimen sionista para perpetuar la tensión y la creación de crisis en Palestina ocupada y en la región.
“La Mezquita Al-Aqsa, como la primera Qibla (dirección de la oración) de los musulmanes, tiene un respeto especial entre los musulmanes y el pueblo palestino. La secta sionista que gobierna Palestina ocupada, al profanar este lugar sagrado, busca alterar la identidad islámica e histórica de Al-Quds, provocar los sentimientos de los musulmanes en todo el mundo e intensificar las tensiones en Palestina ocupada”, ha denunciado.
🎥🔴 Más de 3000 colonos israelíes irrumpieron en el recinto de la mezquita de #AlAqsa
— HispanTV (@Nexo_Latino) August 3, 2025
🔸El ministro israelí #BenGvir encabezó la incursión, acompañado por más de tres mil colonos, quienes realizaron rituales talmúdicos colectivos con cantos, danzas y gritos.#IsraelCrimes pic.twitter.com/1tUt6NM3e2
Al subrayar que Al-Quds unificada es la capital eterna de Palestina, Baqai ha precisado que la comunidad internacional tiene la responsabilidad de obligar al régimen ocupante a detener sus políticas racistas y criminales contra el territorio y el pueblo palestinos.
El ministro extremista israelí de seguridad interna, Itamar Ben-Gvir, a la cabeza de un grupo de colonos sionista, irrumpió de nuevo este domingo en la Explanada de las Mezquitas en la ocupada ciudad de Al-Quds, que alberga la Mezquita Al-Aqsa.
Tras interrumpir la Mezquita Al-Aqsa, el ministro sionista urgió “la ocupación total de la Franja de Gaza”, y exigió a los palestinos que abandonen el enclave bloqueado.
Ben-Gvir y otros sectores de la derecha israelí han desafiado en repetidas ocasiones los lugares sagrados de los musulmanes, tal es el caso de la Mezquita Al-Aqsa, que está bajo el control del régimen sionista, pero solo los musulmanes pueden rezar allí, mientras que los judíos pueden visitarlo en horarios limitados, pero no realizar plegarias, una norma que Ben-Gvir y sus simpatizantes hacen caso omiso.
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