De acuerdo con informes proporcionados por fuentes en la Cancillería iraní, los restos mortales de 130 de los 169 iraníes que perdieron la vida en la tragedia de Mina llegarán a Teherán, capital iraní, y serán enterrados en el cementerio de los mártires en una ceremonia oficial a la que acudirá el presidente iraní Hasan Rohani.
El mandatario, que se encuentra en Nueva York (EE.UU.) para asistir a la 70ª Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), regresará al país hoy por la tarde debido a esta tragedia.
Aunque el ministerio de Salud de Arabia Saudí cifra en casi 770 el número de víctimas mortales, la Organización de Hach y Peregrinación de Irán eleva la cifra hasta más de 2000 personas, incluidos 169 iraníes. Además, unos 46 iraníes se encuentran hospitalizados y otros 307 siguen desaparecidos.
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