El representante permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Amir Said Iravani, en una carta dirigida el viernes al secretario general de la ONU, António Guterres, desestimó las acusaciones, reiteradas recientemente por el enviado del régimen israelí.
“Las recientes decisiones y medidas adoptadas por los grupos de la Resistencia palestinos están determinadas únicamente por los propios palestinos y están firmemente arraigadas en el principio fundamental de la autodeterminación”, añadió Iravani.
El embajador permanente de Irán ante la ONU advirtió además contra la continuación de los crímenes israelíes contra los palestinos en Gaza y llamó a la comunidad internacional a dar un paso adelante y detener la violencia.
“La República Islámica de Irán insta a la comunidad internacional, a los Estados miembros de las Naciones Unidas y, en particular, al Consejo de Seguridad a asumir sus responsabilidades y tomar medidas decisivas, obligando al régimen israelí a poner fin a su ocupación, atrocidades y acciones agresivas y cumplir firmemente con sus obligaciones internacionales, incluidas las del derecho internacional humanitario y los derechos humanos”, agregó.
Esta declaración fue producida días después de que The Wall Street Journal alegara que funcionarios de seguridad iraníes ayudaron a planificar el ataque sorpresa del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) contra el régimen sionista y dieron luz verde a la operación Tormenta de Al-Aqsa”.
Desde el sábado que las Brigadas Ezzedin Al-Qassam, brazo armado de HAMAS inició su operación contra el régimen de Tel Aviv, los medios occidentales han abordado una serie de acusaciones infundadas sobre la implicación de Irán en estos ataques. Esto mientras las autoridades iraníes han refutado enérgicamente tales acusaciones, enfatizando que la Tormenta de Al-Aqsa es una “defensa legítima” contra décadas de ocupación israelí.
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