Durante las multitudinarias marchas del lunes, el pueblo iraní condenó las políticas hostiles y sanciones antiraníes de Occidente, en particular Estados Unidos.
Muchos sectores de la sociedad persa participaron junto con las autoridades de la República Islámica de Irán a los festejos por el 40.º aniversario de la Revolución, que dirigió el Imam Jomeini (que descanse en paz).
La marcha en la capitalina Teherán concluyó en la emblemática plaza Azadi, con un discurso del presidente Hasan Rohani, queien aseveró que Irán seguirá resistiendo ante la guerra psicológica, mediática y económica de los enemigos contra la Revolución.
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