Mientras los palestinos de Gaza están bajo las bombas de Israel, la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) convocó una reunión de emergencia sobre la Franja, para hablar sobre la situación catastrófica en el enclave costero donde los sionistas matan a familias, paralizan a hospitales, destruyen barrios, mientras la gente huye de un sitio a otro sin un lugar seguro al que ir. El enviado palestino pidió a los 193 Estados miembros, un alto el fuego, y denunció la hipocresía del Occidente al respecto.
A su vez, el canciller de Irán, Hosein Amir Abdolahian, lamentó que la comunidad internacional es testigo del crimen de guerra y genocidio en Gaza y Cisjordania por el régimen israelí. Exigió cesar los crímenes de los sionistas e hizo un llamado a los EE.UU. y sus aliados trabajar por la paz y no por la guerra contra personas inocentes.
Por otro lado, el canciller jordano, Ayman Safadi, en nombre de los 22 países del grupo árabe, criticó severamente el derramamiento de sangre en Gaza y urgió el fin de la guerra israelí contra los palestinos.
La AGNU debate durante dos días sobre palestina, tras el fracaso del Consejo de Seguridad en tomar medidas, por dos vetos de Estados Unidos de las resoluciones que abogaban por un alto el fuego en la Franja de Gaza.
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