La 34.º sesión de la Conferencia Nacional Árabe tiene lugar en Beirut, Líbano, con la participación de 250 figuras destacadas del mundo árabe. Desde allí se subraya la necesidad de un proyecto árabe unificado. El líder político de Hamás, abrió el discurso destacando la Tormenta de Al-Aqsa como el “gran proyecto” para avanzar hacia la liberación de Palestina.
El líder del Movimiento de Yihad Islámica Palestina también ha intervenido durante la conferencia para agradecer el apoyo recibido desde Irán, Líbano y Yemen en la guerra con Israel y criticó el plan de paz de Trump, que, ha creado obstáculos insalvables para la solución del conflicto.
El líder de Ansarolá de Yemen, por su parte, explicó que la celebración de la reunión representa una oportunidad crucial para formular respuestas coordinadas a los desafíos que enfrenta la nación árabe.
También hizo acto de presencia Ammar al-Mousawi, responsable de Relaciones Internacionales y Árabes de Hezbolá. En su declaración, al-Mousawi criticó la reciente decisión del gobierno libanés de restringir las armas de la resistencia, calificándola como una consecuencia de las injerencias occidentales. Al-Mousawi enfatizó que la postura de la resistencia es clara: no se entablará ningún diálogo mientras el enemigo no cumpla con sus compromisos.
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