“Afganistán se encamina a toda velocidad hacia un desastre masivo, predecible y prevenible. Y los esfuerzos surrealistas de la Administración [de EE.UU.] para defender la política imprudente del presidente Biden son francamente humillantes”, denunció el jueves el líder de los senadores republicanos, Mitch McConnell.
Al abordar la decisión del Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono) para enviar unos 3000 efectivos al Kabul, la capital afgana, con el fin de garantizar la seguridad del personal diplomático que será evacuado del país centroasiático, el senador criticó cómo el Gobierno de Biden, de manera “absurda e ingenua”, argumenta que el derramamiento de sangre podría dañar la reputación internacional del grupo armado Talibán.
A menos que Biden ajuste el rumbo rápidamente, los talibanes conseguirán una victoria militar significativa, indicó, aseverando que los informes sobre una nueva reducción en la embajada estadounidense en Afganistán y un despliegue apresurado de fuerzas militares parecen preparativos para la caída de la capital afgana.
“La estrategia del presidente Biden ha convertido una situación imperfecta, pero estable, en una gran vergüenza y una emergencia global en cuestión de semanas”, aseveró McConnell, para luego alertar de que los costos y ramificaciones repercutirán en todo el mundo.
Ante tal coyuntura, el senador republicano urgió a que el mandatario estadounidense se comprometa de inmediato a brindar más apoyo a las fuerzas de Afganistán.
En los últimos meses, Afganistán es escenario de enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los talibanes que buscan hacerse con el poder. En esta línea, un funcionario de Defensa de EE.UU. dijo el miércoles a la agencia británica de noticias Reuters, que los insurgentes podrían aislar Kabul en 30 días y posiblemente tomar su control en 90 días.
El reforzamiento de Talibán, en paralelo con la retirada de las fuerzas de EE.UU. de Afganistán, para algunos observadores no es mera coincidencia. De hecho, dicen que Washington, cuya presencia en el país asiático causó un inmenso sufrimiento para el pueblo afgano, busca justificar su permanencia en este país de cualquier manera.
No obstante, las autoridades afganas han prometido defender la nación y seguir recuperando los territorios ocupados por Talibán.
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