“Este es un grave crimen, una violación directa del derecho internacional. Si utilizaron cualquier equipo estadounidense, también viola la ley estadounidense”, así lo lamentó la representante demócrata por el estado de Minesota en la Cámara Baja de EE.UU., en un mensaje publicado el viernes en su cuenta de Twitter.
Sus duras críticas se producen después de que el primer ministro palestino, Muhamad Shtayeh, anunciara que las fuerzas militares del régimen de Israel habían “demolido por completo” la aldea de Khirbet Hamsa al-Foqa, en el norte del valle del Jordán, desplazando a unos 80 palestinos.
“Una comunidad entera está ahora sin hogar y probablemente experimente un trauma de por vida”, señaló Omar en su tuit, para luego insistir en que “EE.UU. no debería financiar ninguna limpieza étnica, sea donde sea”.
Omar, que es una firme defensora de la causa palestina, presentó anteriormente una resolución ante el Congreso de EE.UU. para apoyar el derecho a boicotear al régimen de Israel.
This a grave crime—in direct violation of international law. If they used any US equipment it also violates US law.
— Ilhan Omar (@IlhanMN) November 6, 2020
An entire community is now homeless and will likely experience lifelong trauma.
The United States of America should not be bankrolling ethnic cleansing. Anywhere. https://t.co/cdJgqS6Nwe
Desde su ilegal creación en 1948, el régimen israelí ha destruido cerca de 166 000 viviendas palestinas, dejando sin hogar a alrededor de un millón de personas, según informó en octubre el Centro de Investigación de las Tierras, una organización afiliada a la Asociación de Estudios Árabes en Al-Quds (Jerusalén).
A su vez, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha denunciado que, en medio de la actual crisis sanitaria a nivel mundial, Israel demolió, entre marzo y agosto, unas 390 estructuras de propiedad palestina en la ocupada Cisjordania —una media de 65 al mes—, lo cual constituye la tasa de destrucción cociente más alta en cuatro años.
La polémica decisión de Israel de demoler la citada aldea palestina ha sido duramente criticada tanto por los palestinos como por organismos internacionales. Al respecto, la ONU denunció el pasado viernes que Israel ha ejecutado la mayor demolición de un poblado palestino en una década, por lo cual le exigió que cese de inmediato acciones como esta.
La Unión Europea (UE) se sumó a las críticas contra Israel, afirmando que las recientes demoliciones confirman, una vez más, la lamentable tendencia de confiscaciones y demoliciones que se está llevando a cabo desde principios del presente año.
De acuerdo con los últimos datos proporcionados por la ONU, se han demolido unas 690 estructuras en Cisjordania, incluida Al-Quds, en lo que va de año en curso; más que en cualquier año completo desde 2016. Como consecuencia de ello, cerca de 870 palestinos se han quedado sin hogar.
myd/anz/rba