Washington está dispuesto a “responder con una acción militar más fuerte de la ya lanzó contra el régimen de Al-Asad en el pasado”, si este último usa armas químicas, dijo el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., John Bolton.
Tal y como ha informado este sábado la revista estadounidense Bloomberg, citando a cuatro fuentes familiarizadas con el asunto, dichas declaraciones se produjeron en una reunión entre Bolton y el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, celebrada el pasado jueves en Ginebra (Suiza), pero que no fue públicamente divulgada.
Según el informe, Bolton acusó al presidente sirio, Bashar al-Asad, de pretender “utilizar armas químicas para retomar una región”, actualmente en manos de los grupos armados, y prometió responder en caso de que eso suceda.
En el encuentro se trató, además, la posible retirada de las tropas estadounidenses de una base militar ubicada en la frontera entre Siria e Irak, o su cooperación con las fuerzas rusas cercanas, ha agregado Bloomberg mientras ha señalado que las partes no llegaron a un acuerdo sobre las condiciones para que eso suceda.
El pasado abril, EE.UU., el Reino Unido y Francia lanzaron un masivo ataque aéreo contra Siria, en respuesta a un presunto ataque químico en la ciudad de Duma, situada en la región de Guta Oriental, sin dar tiempo a que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) iniciara sus investigaciones sobre el incidente.
Por su parte, el Gobierno de Damasco rechazó tajantemente las acusaciones de EE.UU. de que estuviera detrás del ataque químico en Duma, y aseguró que el bombardeo de Washington y sus dos aliados occidentales intentaba salvar a los terroristas de las grandes derrotas que están sufriendo en el país árabe por las operaciones del Ejército sirio.
Rusia, a su vez, ha alertado ya de que un nuevo ataque por parte de Estados Unidos y sus aliados contra Siria hará que los que abogan por el cumplimiento del derecho internacional decidan dar una respuesta “más dura”.
fmk/ctl/lvs/mjs
