Cuarenta días después del martirio de valientes comandantes del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica, asesinados por el régimen israelí, Irán sigue firme, impulsado por su profunda convicción de defender su soberanía y dignidad. En Teherán se realizaron varias ceremonias de homenaje, donde recordaron el sacrificio de comandantes como el general de división Mohamad Hosein Baqeri, el jefe de Estado Mayor de Fuerzas Armadas de Irán, y reafirmaron la determinación del pueblo iraní ante las agresiones externas.
El ataque israelí de la madrugada del 13 de junio, con la intención de debilitar la defensa iraní, fracasó. Ese mismo día, el ayatolá Jamenei nombró nuevos comandantes, restaurando el cuerpo de combate. Apenas quince horas después, Irán lanzó acciones defensivas y ofensivas, fortaleciendo la unidad y el espíritu de resistencia entre su pueblo y ganando el apoyo internacional a la defensa de los oprimidos.
Las respuestas de Irán demostraron al mundo la firmeza de sus fuerzas armadas para proteger la integridad nacional. Hoy, los iraníes de todas las edades alzan su voz en unidad. La era de la agresión sin consecuencias ha terminado. Desde Teherán se envía un mensaje claro: Irán es un símbolo indomable de poder y resistencia.
Samaneh Kachui, Teherán
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