“Soy consciente de la magnitud del daño para Israel en el frente norte” de la Palestina ocupada, reconoció Yoav Gallant durante una conversación sostenida el viernes con soldados desplegados en el norte de los territorios ocupados palestinos, cerca de la frontera con El Líbano, según informó el canal i24NEWS con sede en Tel Aviv.
Desde el inicio de la guerra genocida israelí en la Franja de Gaza, a principios de octubre, que ha dejado más de 35 300 palestinos muertos, el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) lleva a cabo a diario ataques a gran escala contra objetivos militares e intereses de Israel en el norte de la Palestina ocupada en apoyo al pueblo palestino.
Las autoridades israelíes se vieron forzadas a evacuar 43 asentamientos ubicados cerca de la frontera libanesa, por temor a las ofensivas de Hezbolá, lo que significó que más de 62 000 colonos tuvieron que abandonar sus hogares y alojarse en hoteles, alquileres o con familiares o amigos.
En este sentido, Gallant dijo que Israel prefiere evitar una guerra dura con Hezboá, aduciendo que la milicia élite libanesa supone un alto precio para la entidad hebrea. “Una larga ronda de guerra dura sería una catástrofe para El Líbano y Hezbolá, pero también tendría un precio para nosotros y preferimos evitarlo”, dijo el general retirado.
Sus comentarios se producen a pesar de que Hezbolá ha asegurado estar preparada para cualquier escenario, incluida una guerra a gran escala, y ha advertido al régimen sionista de que no subestime el poder de sus combatientes y equipos.
En cuanto a los esfuerzos del régimen para devolver a los residentes de la región norte a sus hogares, el ministro de asuntos militares sostuvo que Israel intenta hacerlo mediante un acuerdo con Hezbolá, “porque sabemos que la guerra tiene precios para todos”, arguyó.
A medida que Israel ha intensificado las agresiones al pueblo palestino en Gaza, Hezbolá también ha ampliado el alcance de sus operaciones, apuntando objetivos sensibles y vitales en la profundidad de los territorios ocupados y empleando cada día armas más avanzadas y sofisticadas.
Hezbolá ha asegurado que está determinada a continuar las operaciones de represalia mientras el régimen de Tel Aviv continúe su brutal guerra contra el enclave palestino.
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