El convoy, con vehículos blindados, tanques y excavadoras, se ha dirigido este sábado hacia las posiciones turcas en la provincia noroccidental de Idlib, según informa el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). Este ya reportó el viernes la entrada de otros 150 vehículos militares turcos al territorio del país árabe.
Turquía, de este modo, ha aumentado a 3480 el número de vehículos militares enviados a la “zona de desescalada” en Idlib desde el 2 de febrero, y ha desplegado más de 8350 soldados turcos en Idlib y en la provincia vecina de Alepo, según el informe.
Turquía sigue enviando refuerzos a las zonas noroccidentales sirias, pese a que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, acordaron el jueves un “alto el fuego” en la provincia noroccidental siria de Idlib.
Idlib, último feudo de bandas armadas y terroristas en Siria, ha sido en las últimas semanas escenario de una escalada de tensiones entre el Ejército sirio, apoyado por Rusia, y Turquía, que respalda a los grupos radicales en esta provincia.
Ankara, que pide el cese de la operación antiterrorista de Damasco en Idlib, ha estado desplegando mayor número de fuerzas en el noroeste sirio, desde donde ataca zonas residenciales y puestos militares sirios en respaldo de los llamados ‘rebeldes sirios’ y facciones terroristas como la alianza Hayat Tahrir Al-Sham, liderada, a su vez, por el Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham).
El presidente sirio, Bashar al-Asad, ha dejado claro que “la batalla por la liberación de las provincias de Alepo e Idlib continúa, independientemente de todas las palabras huecas que vienen del norte”, refiriéndose a las amenazas del presidente turco de que librarán un ofensiva militar en Idlib si el Ejército sirio no detiene sus operaciones antiterroristas en dicha provincia.
tqi/nlr/nii/