Hace ya casi 3 años que los egipcios no cuentan con representantes parlamentarios después de una serie de resoluciones judiciales que han trastocado la vida política del país.
En efecto, es el presidente Abdel Fatah al-Sisi quien ostenta plenos poderes legislativos ante la ausencia de una Cámara Baja. Los comicios programados para este domingo iban a modificar esa situación, hasta que la Corte Constitucional dictaminó que la ley electoral no cumplía con lo estipulado en la Carta Magna. Todavía no existe una nueva fecha para su celebración.
El Alto Comité Electoral debe enmendar ahora la ley que fuera declarada inconstitucional por generar desigualdad entre los votantes. Los partidos han aprovechado para proponer que se aumente el porcentaje de escaños reservados a las formaciones políticas, fijado ahora en el 20 por ciento.
La elección de una Cámara legislativa sería el último paso en la hoja de ruta fijada en 2013 tras el derrocamiento de Mohamad Mursi.
Si las constantes dilaciones lo permiten, los futuros parlamentarios tendrán que votar las leyes ya promulgadas por el presidente Abdel Fatah al-Sisi y por su predecesor Adli Mansur.
Rocío López, El Cairo.
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