La mujer en cuestión estaba a cargo de proyectos culturales en la oficina en Irán del British Council (Consejo Británico) y cooperaba con las agencias de Inteligencia británicas, declaró el lunes Qolam Hosein Esmaili, sin identificar su nombre.
En declaraciones en una rueda de prensa en Teherán, el vocero del Poder Judicial iraní indicó que la acusada fue una estudiante en el Reino Unido, antes de que fuera reclutada por el Consejo Británico y recibiera el entrenamiento necesario por parte de los servicios de seguridad británicos.
“La mujer ha hecho confesiones claras sobre la forma en que la habían reclutado y ha ofrecido informaciones sobre las instrucciones que le habían dado en la agencia de seguridad británica”, indicó Esmaili.
El funcionario iraní agregó, además, que la espía visitaba con frecuencia Irán, usando distintos nombres y en el país persa diseñaba e implementaba proyectos culturales en línea con “las metas culturales del colonialismo viejo” británico.
La mujer ha hecho confesiones claras sobre la forma en que la habían reclutado y ha ofrecido informaciones sobre las instrucciones que le habían dado en la agencia de seguridad británica”, dice Qolam Hosein Esmaili, portavoz del Poder Judicial de Irán.
“La persona contactaba con grupos de teatro y arte para implementar los proyectos de infiltración y emboscada culturales”, señaló el portavoz del Poder Judicial de Irán.
En diferentes ocasiones, la República Islámica ha detenido a espías provenientes del Reino Unido, de otros países europeos y de Estados Unidos, que buscaban realizar operaciones de espionaje en el territorio iraní.
En abril de 2018, las fuerzas de seguridad iraníes detuvieron a los miembros de un equipo afiliado a los servicios de inteligencia del Reino Unido que mantenían vínculos con los grupos antirrevolucionarios que lideraron los violentos disturbios postelectorales de 2009 en el país persa.
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